En Quebec, oponemos resistencia
09 Junio 2017
Dado el creciente número de ataques contra el derecho a la salud, la Alianza del personal profesional y técnico de la salud y de los servicios sociales (APTS) ha desarrollado un plan de acción para proteger el acceso de la población a unos servicios de calidad. Como principal representante del personal profesional y técnico de Quebec, APTS se encuentra en una posición privilegiada para denunciar las políticas inaceptables y proponer soluciones.
Los trabajadores sociales, los educadores, los técnicos de laboratorio y los terapeutas ocupacionales a los cuales representa el sindicato, entre otros, son testigos a diario de los estragos de la austeridad en los servicios sociales y de la salud. Se están defendiendo valientemente de graves ataques.
En los últimos meses el sindicato se ha colocado en la primera línea de la defensa de la integridad de los centros locales de servicios comunitarios (CLSC) que ofrecen una amplia gama de servicios a usuarios a menudo vulnerables. El gobierno ha decidido transferir los ámbitos cubiertos por los CLSC a los grupos de medicina familiar (GMF), unas entidades privadas dirigidas por médicos. Pero los GMF no abarcan la misma clientela y no ofrecen la misma variedad de servicios. El sindicato prosigue la lucha.
El gobierno también ha atacado a los laboratorios que realizan análisis de muestras tomadas de los pacientes. Estas muestras son esenciales para los diagnósticos, incluso del cáncer. Gaétan Barrette, ministro de la salud y los servicios sociales, ha impulsado precipitadamente un plan (llamado OPTILAB) destinado a centralizar los análisis en un puñado de laboratorios sin consultar a las principales partes interesadas.
Si este plan sale adelante, las muestras deberán viajar cientos de kilómetros antes de llegar a su destino. Sin embargo, cuanto más viaja una muestra, más probabilidades tiene de resultar dañada. Afortunadamente, APTS y sus técnicos de laboratorio, que están en el centro de los servicios de laboratorio, se mantienen vigilantes y han denunciado los métodos autoritarios del gobierno ante el tribunal administrativo laboral. El sindicato está todavía a la espera de que se tome una decisión sobre este asunto.
APTS también ha venido apoyando las numerosas luchas contra los recortes presupuestarios efectuados en los servicios destinados a la población. Se han recortado miles de millones de dólares en los servicios de salud mental y para los ancianos y los jóvenes que se encuentran en dificultades, entre otros. Este año el sindicato está siendo testigo de un ligero incremento de la reinversión en los servicios por parte del gobierno. La constante presión de APTS ha contribuido probablemente a que se adoptara esta medida.
Durante las últimas semanas, tras una campaña de lealtad al sindicato, APTS ha crecido de 32.000 a 52.000 miembros, lo que le dará aún más fuerza para hacer oír la voz del personal profesional y para lograr mejoras en los aspectos técnicos de la red de salud y servicios sociales de Quebec.
Carolle Dubé, Presidenta de la Alianza del personal profesional y técnico de la salud y de los servicios sociales (APTS)